BELGICA.- El Quick-Step Floors fue el equipo con más triunfos en 2017 por quinto año consecutivo. Entre sus 56 triunfos, los más destacados fueron las victorias de Philippe Gilbert en el Tour de Flandes y la Amstel Gold Race, las cinco victorias de etapa en el Tour del alemán Marcel Kittel y las cuatro en el Giro del colombiano Fernando Gaviria. No es de extrañar que el CEO del escuadrón, Patrick Lefevere, estuviera exultante durante su entrevista en el reciente Rouleur Classic.
Sin embargo, incluso el equipo más exitoso de los ciclistas profesionales no es inmune a los problemas generales del deporte. Lefevere solo aseguró el patrocinio de Quick Step para el futuro en junio.
¿Cómo ve el estado actual del deporte? “Son todas las personas las que pagan por su hobby, no es saludable”, dijo Lefevere.
¿Se preocupa por Quick Step? “No lo hago porque soy un anciano, puedo irme y retirarme mañana. Pero me preocupa el ciclismo porque en mi corazón, todavía hay una bicicleta. Quiero que este hermoso deporte continúe”.
Alaphilippe, Gilbert, Stybar y Terpstra, así como Fernando Gaviria, Lefevere es un hombre con opciones para futuros Monumentos. “Compartiremos líderes para las clásicas en los próximos años. Nunca pondré todo mi dinero en un solo ciclista, de ninguna manera", dijo Lefevere.
Sin embargo, el belga está triste por perder a Matteo Trentin la próxima temporada. El italiano ganó cuatro etapas de Vuelta y Paris-Tours este otoño y estuvo con el equipo desde que se convirtió en profesional en 2012. “Así que se fue, y luego comenzó a ganar. Tuvimos una pequeña fiesta en Madrid y los dos estábamos tristes. Porque sabía que había perdido a un tipo real de Quick Step, pero sabía que probablemente firmó demasiado pronto”.
Lefevere tiene una historia de convertir el talento en estrellas de buena fe, desde Tom Boonen hasta Michal Kwiatkowski pasando por Julian Alaphilippe. Peter Sagan fue a una prueba con el equipo cuando tenía 17 años en 2007. “Desafortunadamente, era un poco más loco que ahora y no tenía un traductor. Peter no hablaba inglés o italiano entonces", dijo Lefevere.
“Creo que hace dos años pude llevarlo, por supuesto por un montón de dinero, pero él trajo a once personas. Creo que pidió cuatro ciclistas y el resto era personal.
“No quiero una isla en mi equipo. Tengo un equipo, hay un jefe y todos tienen muy claro quién es ese: yo. No hay favoritos Boonen, Gaviria, Cavendish, por supuesto tienen privilegios, pueden pedir tener un compañero pero no 11 personas. Esto molesta mucho a un equipo. Para Bora-Hansgrohe, fue un regalo que tuvieron que tomar con ambas manos. Pero no pude. Con el nivel en el que estamos, si tomase a Sagan, ya no tendría equipo “.
Podría decirse que Lefevere tampoco lo necesitaba. Hasta su retiro después de Paris-Roubaix de este año, podía confiar en Tom Boonen, la estrella destacada del deporte belga. En total, pasó 15 temporadas con Quick Step y Lefevere. (Fuente: Quick Step Floors Cycling Team).
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