Por Alejandro Matiz.-
Ciclismo Internacional.-
¿Existe el triplete perfecto? Parece ser que Wout van Aert lo ha creado. Complementó sus increíbles triunfos en el Ventoux y la crono, alzando los brazos en el embalaje de los Campos Elíseos, motivo de gran emoción ya que a la vez significó el cierre del mejor Tour que ha hecho hasta ahora.
“No me lo puedo creer. Este Tour de Francia ha sido fantástico. Ha sido una auténtica montaña rusa. Acabar con tres victorias en el bolsillo estaba completamente fuera de mis expectativas”, declaró emocionado un Van Aert que ya había conquistado un parcial de alta montaña y una contrarreloj individual, prueba fiel de su versatilidad.
“Una victoria como ésta no tiene precio. Tengo que coger el avión para volar a Tokio esta noche y las entrevistas posteriores a la victoria van a llevarme un rato; iré justo, ¡pero merece la pena!”, reveló, pues al igual que él, muchos de los corredores que completaron este Tour, deberán emprender vuelo a la capital japonesa para unirse a sus respectivas delegaciones.
Agradeció a su mermado elenco por trabajar excelentemente para concretar esta icónica victoria. “Quiero dar las gracias a mi pequeño equipo, y especialmente a Mike Teunissen, que me colocó perfectamente para el sprint final”, mencionó con gratitud. “Era clave estar bien situado después de la última curva. Confiaba en que Mike podía lanzarme a la perfección, ¡y lo hizo!”, agregó.
Claramente ha sido una carrera de ensueño para esta perla belga que va rompiendo paradigmas con el paso del tiempo. Escala de maravilla, hace las cronos de forma impecable y es capaz de esprintar con los mejores. No se le pedir nada más. Un fenómeno en lo absoluto.
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