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| El pedalista noruego vistió por siete días consecutivos la maglia roja de líder de la ronda ibérica. |
Por Alejandro Matiz.-
Ciclismo Internacional.-
Vestir un maillot de líder en cualquiera de las grandes puede ser algo más que una fuente extra de motivación, puede ser la llave de entrada a una mejor oportunidad y un trampolín en la carrera deportiva de cualquier corredor. A Odd Christian Eiking le cambió la vida portar el rojo de La Vuelta, hasta el punto de garantizarle un contrato en una mejor estructura del World Tour.
Tal como se anunció en redes sociales, el EF-Education Nippo será el nuevo hogar del talentoso noruego, caudillo de la cita ibérica por 7 días. Desde 2022, llevará el rosa de la escuadra americana que supondrá su tercer ciclo en la máxima categoría tras competir por dos temporadas en FDJ y cuatro en el Intermarché.
“Vestir la roja me cambió como corredor. Me dio más confianza ver que es posible estar con algunos de los mejores ciclistas. Quiero seguir por este buen camino donde estoy ahora”, reforzó Eiking sobre esa positiva realidad que implica liderar una carrera de tal envergadura. “Es algo que nunca creí que fuera a suceder”.
Sobre por qué optó hacer parte del proyecto de EF, la oportunidad de crecimiento y hacer parte de un cálido grupo fueron los principales impulsores para dar el visto bueno. “Necesito estar en un lugar donde pueda crecer y desarrollarme y EF se ve realmente genial para que me desarrolle. Me parece un grupo realmente bueno y quiero ser parte de él ”.
Sin embargo, su presentación en la Vuelta a España no fue la causa de su fichaje, fue la ratificación. Al rutero de 26 años, ya le venían haciendo seguimiento desde el equipo encabezado por Jonathan Vaughters a lo largo de todo el curso. Su subcampeonato en la Arctic Race y el top-10 en la Clásica San Sebastián ya sustentaban el interés, materializado en una propuesta que el corredor no aceptó de inmediato.
El motivo para no dar el ‘sí’ a las primeras de cambio, recalaba en un menester interno de Odd Christian de demostrar más talento y complementarlo con resultados más loables. Eso, impresionó a Vaughters. “No quería hablar de un contrato hasta que se probara a sí mismo en las carreras y pensé, ‘Mierda, este tipo tiene las agallas para rechazar una oferta potencial y quiere mostrar su valía primero’. Muy pocos en su posición haría eso. El hecho de que quisiera demostrar su valía es una actitud que lo llevará muy lejos”, recalcó el director.
Dos misiones esenciales tendrá en esta estancia -que aunque no lo revela el comunicado, parece ser por dos años-, la primera aprovechar ese margen de crecimiento para ir puliendo resultados y nivel, y segundo, emplear como motor para el buen rendimiento, la propia esencia y filosofía del ciclismo a la que en EF se le da tanta importancia. “Este es un deporte duro. Es mucho trabajo para llegar a la cima y eso que ni siquiera estoy en la cima. Llegar a donde estoy ahora ha sido de gran esfuerzo. Y ahora con el equipo, espero ganar más carreras”.
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