Por Tirso Barrera
Especial para deciclismoymas.blogspot.com
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El vegano Gustavo Renso Deschamps merece ser reconocido en vida por su trayectoria deportiva en el ciclismo.
Es una constante en este país y una mezquindad no otorgar el mérito a sus grandes hombres, especialmente a quienes descollaron y pusieron en alto el nombre de la República Dominicana en el extranjero.
En el caso de Chichí, éste no incurrió en falta que pueda quitar o manchar sus méritos, fuera del ámbito del deporte o personal.
Si su exclusión del Pabellón de la Fama del Deporte Vegano obedece a la decisión que tomó de quedarse en los Estados Unidos cuando iba a competir en los Juegos Deportivos Panamericanos de Indianápolis 1987, esa decisión en ese momento fue correcta, sino hoy en día estuviera parado en una esquina hablando con los poste de luz en la pobreza.
En el tiempo que Renso Deschamps brilló, no eran las mejores condiciones para una atleta de alto rendimiento.
Si Leonardo Matos Berrido, ex presidente de LIDOM, fue acusado de matar a una mujer y luego absuelto, ejemplo entre otros, cual es la razón de no ingresar al Pabellón de la Fama a alguien que no incurrió en actitudes deportivas y personales incorrectas, su decisión le permitió sobrevivir...
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