Ciclismo Internacional.-
LANDERNEAU, Francia.- El francés Julian Alaphilippe (Deceuninck-Quick Step) salió victorioso en la jornada inaugural del Tour de Francia 2021, pactada sobre 197.8 kilómetros entre Brest y Landerneau. El campeón mundial enseñó su clase de potencia en repechos para hacerse con la primera conquista y el primer Maillot Jaune, tras un día marcado por la irresponsabilidad humana.
En una inauguración veloz, causada por la falta de acuerdo entre aventureros y pelotón por configurar una escapada, fueron seis corredores con frescura en las piernas los que pudieron participar en la primera fuga de la 108º edición de la ronda gala: Ide Schelling (BOH), Anthony Pérez (COF), Cristian Rodríguez (TDE), Danny Van Poppel (IWG), Franck Bonnamour (BBK) y Connor Swift (ARK).
Ceñidos a la lógica, Alpecin-Fénix y Deceuninck-Quick Step asumieron el control del paquete principal como responsabilidad propia de poseer a los máximos favoritos para el triunfo de etapa. Su cómodo paso le otorgó un margen aproximado de tres minutos a los punteros, quienes como en todo parcial inicial de una gran vuelta, aprovechaban su posición para jugarse un primer botín atractivo como los puntos de montaña.
En dicha batalla, el más reluciente era Schelling que en cada rampa daba la sensación de ir con un punto de más, comparado al resto de miembros del grupo cabecero. Confirmó su fortaleza a más de 80 km en el Côte de Stang ar Garront (4°) con una potente aceleración sin respuesta alguna de los demás componentes, convirtiéndose en cabeza de carrera en solitario.
Prontamente, Van Poppel y compañía serían neutralizados. Esto, junto antes del sprint intermedio, que exhibió destellos de los aconteceres de la lucha entre embaladores para esta versión. Fue Caleb Ewan (LTS) quien recolectó la mayoría de unidades disponibles imponiéndose ante Peter Sagan (BOH), Michael Matthews (BEX) y Bryan Coquard (BBK). Aparición más opaca de Bouhanni, Cavendish o Colbrelli. ¿Hegemonía del australiano en la velocidad? Interrogante a despejar desde el lunes.
El nerviosismo tocó su punto álgido a 45 km de la conclusión gracias a una caída masiva que perjudicó a prácticamente todo el lote. Y lo peor de todo, por culpa de la estupidez de una aficionada que por su afán de salir en TV con una pancarta, se atravesó en la fila del Jumbo-Visma, mandando al suelo a Tony Martin y con él, a todos los demás como fichas de dominó.
Largos minutos de tensión y confusión, mientras todos se reubicaban y se determinaban a los más damnificados por el incidente. Abandono de Sutterlin (DSM), afectados López (MOV), Van Aert (TJV), Kuss (TJV), Sagan, entre otros muchos. En fin, una drástica alteración deportiva originada por la imprudencia humana…
Poco a poco, la reestructuración del pelotón liderada por Deceuninck, abrió las puertas al recorte del hueco de Schelling que aguantó en punta hasta falta de 28 km. De ahí el siguiente tramo, pura transición para calmar los ánimos y permitir el reingreso de otro colectivos menores rezagados destacando la presencia de Ewan o Hirschi.
No obstante, la mala suerte estaba destinada para esta fracción inicial y una nueva caída masiva a poco menos de 6000 metros afectó a la mitad del grupo mayor. La diferencia con la otra fue que no hubo influencia de terceros para ella, y tampoco espera de los cuadros comandantes al tener una carrera lanzada.
El tren de los ‘lobos’ laboró a la perfección, catapultando a su baza, Julian Alaphilippe a 2300 metros de sentencia a pie del ascenso final. Mucha fuerza para el galo, sin rival alguno para darle caza.
Lo intentaron Roglic, Pogacar o Latour, sin mostrar el mismo desarrollo de potencia del arcoíris. Al final, Julián ingresó a meta en solitario y con tranquilidad para hacerse con su sexta gloria en un Tour y siendo el cuarto consecutivo en el que saborea la victoria. Nuevo líder por demás y ahora con la premisa de sostener esa casilla el mayor tiempo posible.
Las adversidades extra-deportivas provocaron diferencias importantes. Por ejemplo, con Richard Carapaz llegando a 13″, Miguel Ángel López cediendo casi 2′ y más atrás Richie Porte. Todo sin contar la bonificación de 4″ a cargo de Primoz Roglic. Era un día llamado a establecer cortes poco significativos, pero este es el Tour, una mezcla de caos y riesgo que castiga de la forma menos esperada y muy cruel. Quedan 20 días y una gran incertidumbre sobre las siguientes acciones a presenciar.
Mañana se llevará a cabo la segunda jornada del Tour de Francia 2021, un trazado sinuoso de 183.5 kilómetros partiendo de Perros-Guirec y arribando al reconocido Mûr-de-Bretagne.
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