Por Andrés Fonseca.-
Ciclismo Internacional.-
Con un ataque de lejos Fernando Gaviria intentó sorprender a los sprinters. Sin embargo, al colombiano le faltaron las fuerzas para culminar con éxito la séptima etapa del Giro de Italia.
“El equipo trabajo a la perfección, pero me faltaron un poco de piernas”, dijo el corredor del UAE Team Emirates al final de la jornada.
El velocista colombiano cambió de estrategia y arriesgó en el cierre, lanzando un ataque a 500 metros de la meta, que fue respondido con un contrataque de Caleb Ewan. En el remate, que tenía un pequeño repecho con el 12% de inclinación, el corredor antioqueño entró bien ubicado y finalizó en el sexto puesto.
“Los muchachos hicieron un buen trabajo para ponerme en posición hoy y no meterme en problemas. Volví a estar con los mejores corredores en el sprint y la condición está ahí, así que seguiremos intentando conseguir esa victoria de etapa”, señalo Gaviria.
La primera opción que tuvo Fernando de ganar en esta edición del Giro fue en la segunda etapa, en la que el antioqueño se desconectó de su tren de lanzamiento, integrado por Juan Sebastián Molano y Maximiliano Richeze; debido a la falta de comunicación, terminó arrinconado contra las vallas por su compatriota y compañero de equipo.
En la quinta, como en la etapa dos, Molano y Richeze se ubicaron en la parte delantero del pelotón para lanzar al colombiano, quien les perdió la rueda, lo que lo dejó sin fuerzas a la línea de meta, llegando quinto.
Recientemente, el entrenador colombiano Luis Fernando Saldarriga, director durante muchos años de Colombia es Pasión, 4-72 y Manzana Postobón, y descubridor de talentos como Nairo Quintana o Esteban Chaves, se refirió al sprinter paisa diciendo que había perdido un poco de confianza y la concentración de ganar.
El pedalista de 26 años, que en 2017 vistió la maglia ciclamino al coronarse campeón por puntos de la corsa rosa, no conoce la victoria desde el 16 de septiembre de 2020.
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