Federación Dominicana de Ajedrez destaca iniciativa histórica liderada por Omayra Aybar en San Cristóbal

Vista de los niños durante el campamento.

SAN CRISTÓBAL, Republica Dominicana.– La Federación Dominicana de Ajedrez se honra en reconocer el trabajo, liderazgo y compromiso de la Maestra Nacional Omayra Aybar, única organizadora internacional y organizadora asociada del país, así como árbitra nacional. Aybar ha marcado un hito al organizar por primera vez en San Cristóbal un campamento de ajedrez infantil, en el que 46 nuevos niños fueron introducidos al apasionante mundo del ajedrez.

Uno de los momentos más emotivos fue protagonizado por su hija, Maia Sofía, de tan solo 8 años, quien compartió un mensaje que se volvió viral en redes sociales. Con gracia y seguridad, motivó tanto a niños como a padres a descubrir los beneficios del ajedrez. Su entusiasmo inspiró a muchos a sumarse al campamento con su lema espontáneo:

“¡Con 8 años, aprende a jugar ajedrez con Maia Sofía!”

Con esta intervención, Maia sigue el legado de su madre, y se ha convertido en una promotora natural del ajedrez infantil.

Durante la actividad, Omayra Aybar expresó:

“El ajedrez no es solo un juego, es una escuela de vida donde aprendemos a pensar antes de actuar y a levantarnos después de cada caída.”

En el marco del evento, Aybar también presentó al equipo de trabajo de su nuevo proyecto educativo: Escuela de Ajedrez San Cristóbal, una iniciativa que busca formar a niños y jóvenes con valores, pensamiento estratégico y disciplina. Entre sus miembros destacan:

            •          Augusto Antonio Adames, pionero del ajedrez en San Cristóbal, con una trayectoria de formación y desarrollo comunitario.

            •          Sergio Pacheco, actual campeón provincial y candidato a Maestro FIDE (CM), quien se incorpora como entrenador para fortalecer la preparación competitiva de los alumnos.

La Federación Dominicana de Ajedrez felicita a Omayra Aybar por esta iniciativa sin precedentes en la provincia, así como por su entrega en la formación de nuevas generaciones a través del ajedrez. Este campamento marca el inicio de una etapa transformadora que fortalecerá la cultura ajedrecística en San Cristóbal y todo el país.